_Ser madre_
Ser madre es una maestría en la que lo hijos son mentores en el camino de la vida
Ser madre es amar con el corazón expandido
Ser madre es vivir en una generosidad desinteresada
Ser madre es cuidar desde la sabiduría con afecto, ternura y firmeza.
Ser madre es saber que cuando tu hijo te dice – Déjame en paz- En realidad te está gritando guíame
Ser madre es saber que cuando tu hijo te dice- Ya soy mayor y sé lo que hago- En realidad te está demandado que le acompañes en silencio, solo necesita sentir que estarás al margen del resultado
Ser madre es atender nuestra propia emocionalidad con adultez para no sangrar sobre nuestros hijos
Ser madre es entender que para tu hijo eres guía y luz en el camino sin embargo ellos caminaran su vida al margen de la tuya
Ser madre es abrazar, escuchar, honrar, acompañar, es sigilo, observación, guía, es sentir, estar, respirar sus anhelos para que los vuelen solos bajo nuestra tierna mirada.
_Ser padre_ aplica todo lo anterior
Papas divorciados, parejas separadas que desde su herida se vinculan con sus hijos, unos hijos que reciben el enfado, la rabia, el rencor, de sus progenitores, que irresponsablemente se están maltratando generando vidas llenas de dolor, tormentas y pena.
Es nuestro compromiso lamernos las heridas, cuidarnos, atendernos, amarnos, para así poder educar a nuestros hijos desde las personas adultas que somos y no desde los niños heridos.
Si sanamos nosotros nuestros hijos serán libres y nosotros también.
Os recomiendo la lectura de un libro sanador «Sanar el Corazón» de Ketan Raventos Klein, un indispensable para iniciarnos en el camino de la sanación de nuestro niño interior de y vivir desde el amor y con el corazón expandido y sanado
Os abrazo el alma
Sandra Salvadó
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