Desafío: Esta semana la vida me ha retado, podría haberme enfadado, podría haberme puesto en mi antiguo y ya conocido por mi rol de víctima, podría haber escogido la opción de creer que todo me pasa a mi.
Confieso: lloré, me sentí triste, desubicada y conecté con mi herida del alma ( la mía es la del abandono) la sentí viva de nuevo.
Claridad: sin embargo opté por ser observadora de mis pensamientos, no me creí nada de lo que mi ego me decía, simplemente lo observé y me centré en el momento presente, en el ahora todo estaba y todo está bien.
Incomodidad: sentir tristeza, es molesto, sentirse vulnerable es doloroso, no estamos acostumbrados a dar espacio a las emociones porque vivimos en el hacer y porque nos violenta SENTIR
Observar: esta misma semana y a raíz de los hechos que me “entristecieron” he podido observar todos los mensajes que han llegado a mí a través del otro. Esas personas que aparecen en tu vida y te plasman sin reparo el reflejo de tu energía y de tu momento presente.
Aprender: cuando dejas el victimismo a un lado, cuando te abres a los hechos con curiosidad y humildad de repente el otro se convierte en maestro
Afortunada: me siento agradecida y llena de amor por todo lo vivido siempre especialmente esta semana en la que he podido destacar en mi la gran evolución que hecho
Transformación: cuando aprendemos de lo que vivimos nos transformamos, evolucionamos y nos acercamos más y más a quién realmente somos y queremos ser
Acción: todo lo anterior me ha llevado a trazar el plan recordándome que solo desde mi centro puedo avanzar en equilibrio
Incertidumbre: no la siento, porque la lleno de vida, de acción y de poder … ahora si he visto el camino
Cuando trabajar, vivir y servir se alinean entramos en una nueva dimensión entramos en conexión con nuestro dharma
Foco: preparando el programa Divorciarse con Amor el Arte de Amar (te) de 5 semanas con mucha consciencia y amor
-preparando un encuentro por zoom
-preparando encuentros locales presenciales
– agenda abierta para sesiones de coaching y Tarot
Todos somos maestros y aprendices en el camino, gracias por ser luz en el mío
Os abrazo el alma Sandra Salvadó
COMPARTE ESTE POST EN:
